A mis amigos les adeudo la ternura
y las palabras de aliento y el abrazo,
el compartir con todos ellos la factura
que nos presenta la vida paso a paso.
A mis amigos les adeudo la paciencia
de tolerarme mis espinas mas agudas
los arrebatos de humor, la negligencia,
las vanidades, los temores y las dudas.
Un barco frágil de papel
parece a veces la amistad,
pero jamás puede con él
la mas violenta tempestad,
porque ese barco de papel
tiene aferrado a su timon,
por capitan y timonel : Un corazon !
A mis amigos les adeudo los enfados
que perturbaron sin querer nuestra armonía,
sabemos todos que no puede ser pecado
el discutir alguna vez por tonterías.
A mis amigos legaré cuando me muera
mi devolción en un acorde de guitarra,
y entre los versos olvidados de un poema
mi pobre alma incorregible de cigarra.
Amigo mío, si esta copla como el viento
a dónde quieras escucharla te reclama,
serás plural porque lo exige el sentimiento,
cuando se lleva a los amigos en el alma.
y las palabras de aliento y el abrazo,
el compartir con todos ellos la factura
que nos presenta la vida paso a paso.
A mis amigos les adeudo la paciencia
de tolerarme mis espinas mas agudas
los arrebatos de humor, la negligencia,
las vanidades, los temores y las dudas.
Un barco frágil de papel
parece a veces la amistad,
pero jamás puede con él
la mas violenta tempestad,
porque ese barco de papel
tiene aferrado a su timon,
por capitan y timonel : Un corazon !
A mis amigos les adeudo los enfados
que perturbaron sin querer nuestra armonía,
sabemos todos que no puede ser pecado
el discutir alguna vez por tonterías.
A mis amigos legaré cuando me muera
mi devolción en un acorde de guitarra,
y entre los versos olvidados de un poema
mi pobre alma incorregible de cigarra.
Amigo mío, si esta copla como el viento
a dónde quieras escucharla te reclama,
serás plural porque lo exige el sentimiento,
cuando se lleva a los amigos en el alma.
A mis amigos, Jorge Guillén
Jorge Guillen, descansa en el Cementerio de los Ingleses de Málaga.
ResponderEliminarMe topé con su sepultura por casualidad, ya que no hay nadie que te guie. A un paso del mar. Y sus versos siguen cantando.
Gracias Pilar por tus comentarios. No lo sabía y me gustó que me lo comentaras.
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